Lo  de Yoani, más conocida a nivel internacional que dentro de la isla  donde el gobierno la agrede y bloquea su blog Generación Y, es un justo  reconocimiento a una mujer que se impuso a la censura y con coraje y  valentía se desenvuelve en una sociedad cerrada, peligrosa y desafiante  para quienes solo piden libertad. Lo más trascendente de este galardón  es que sirve de incentivo para miles de disidentes en la isla que todos  los días exponen su poca libertad a costa de reclamar mayores espacios y  denunciar las atrocidades del régimen.
EEUU  como una forma de incentivar esos aires de libertad y de mujeres  corajudas que anteponen ideales a su propio bienestar y el de sus  familias, de entre 10 premios, también reconoció a otra latina, la  mexicana Marisela Morales Ibáñez, subprocuradora en delincuencia  organizada de la Procuraduría General de la República de México. 
En  esa lista creo que en México hubo una ausencia. Me hubiera gustado ver a  Adela Navarro, directora del semanario Zeta, de Tijuana, quien semana  tras semana, bajo su batuta o en forma directa, expone su vida  denunciando al crimen organizado y al narcotráfico. Hacer periodismo en  México, en especial en el interior y zonas de frontera dominadas por el  narco es difícil y las implicancias como mujer son peligrosas,  precisamente en un medio que por sus denuncias ha tenido que soportar  asesinatos y atentados como los sufridos por Héctor Félix Miranda,  Francisco Ortiz Franco y Jesús Blancornelas.
Un  premio para Adela serviría para homenajear su estatura como editora, su  compromiso con el periodismo y la libertad de prensa, pero más aún para  llamar la atención sobre su caso y causa y blindarla de los violentos  que siempre están al acecho.
Yoani expone su libertad; Adela su vida. Hubiera sido lindo verlas homenajeadas al mismo tiempo y en el mismo acto.
 
No hay comentarios:
Publicar un comentario